miércoles, diciembre 16, 2009

ahora

Ahora, sentado ante un papel en blanco, sentado en este mismo rincón de este bar de luz indirecta, donde tu sonrisa brillaba tanto o más que en cualquier otro sitio, que tus ojos brillaban, y yo me mordía los labios para evitar morder los tuyos, porque me daba miedo o vergüenza o que más da, lo que fuera.

Ahora, aquí, sentado en la misma silla, con la tuya vacía, pero no, disculpe, está ocupada, vendrá ahora, y pienso, ojalá vengas, aunque sé que no vas a venir, y quiero tener este segundo para mí, con la mesa ocupada por un vaso, por un libro de Javier Marías, por mi cuaderno abierto siempre como a un zurdo menos le incomoda, y escribo sin pensar ni releer, sin corregir como debería hacer, ya lo releeré, aunque sé que no, que ni yo lo releeré ni tú vendrás hoy.

Ahora, que pienso si adivinaré como será tu rostro mañana, que lleno mi boca con tu nombre, que deseo que mañana, en tu batalla, pienses en mí, y que sería bello morir pidiéndote que me cojas en brazos.

Ahora, que me doy cuenta que sigo encantado, o haunted, que aunque es inglés quizá sea más adecuado a como estoy por tu sonrisa y por tus manos, por tus palabras también, y ahora qué, ahora que espero, toca esperar, como si fueras a llegar, como un milagro, como la primera vez que llegaste.

Ahora que he vuelto al primer sitio donde tuve que morder mis labios para no devorar los tuyos, que miraba con mirada feroz o voraz, o quien sabe como, quizá solo con sed.

Ahora, que me levanto de esta silla y enfilo la calle, y me subo el cuello del abrigo, porque hace frío, y el frío me hace pensar en ti, y pienso, ojalá nieve, porque sé que deseabas ver nevar otra vez juntos, quien sabe, quien sabe cuantas veces juntos.

Ahora, a la hora de levantarme e irme, pagar, quizá dar propina, no lo sé, todo depende de cuanto cueste y cuantas monedas tenga. Ahora, que cierro este cuaderno, solo me pregunto si pensarás en mí mañana, en la batalla, mientras yo, al despertar, intenté adivinar como será tu rostro mañana.

1 comentario:

kyrah dijo...

Al leerlo me he acordado del Teguise, no me preguntes por qué :)

muá!