Tú deambulabas entre bares de moda, perdida en danzas, robando besos ajenos. Yo, cargado de orgullo, seducía a viejas amistades pues, en el fondo, somos la misma clase de animal; sólo nos diferencia mi cinismo.
Al final de la noche, tu culpa sabía a desilusión, a besos inocentes, cerveza y gominolas; la mía, a esperma sobre una piel libre de pecado.
Como alguien ya dijo, somos la misma clase de animal; sólo nos diferencia tu hipocresía.
play:"comernos", de Piratas
6 comentarios:
Me gusta. No sé, suena amargo. Bueno, o sincero.
un abrazo :)
Genial texto. Se me ha quedado la última frase, tan familiar, atrapada entre dos costillas.
Un abrazo hecho de sur.
Me gusta mucho. Y la canción.
Bueno. Agrio. Breve. Bueno otra vez
...la sinceridad desborda, y la realidad se pinta del color con que se mira, no hay distinción tal vez pero tú provocas la duda, preciosa historia, y la música acompaña...
Lo bueno... si breve, dos veces buenos, y millones también, todo lo que quieras que sea de bueno,lo es.
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