viernes, agosto 18, 2006

mal de muchos

Paseaba sin rumbo y sin ganas por las calles del viejo barrio, que, una vez más, como cada año, el calor del verano las dejaba medio vacías. Como ya he dicho, paseaba sin destino, con la única intención, tal vez inconsciente, de reencontrarme entre las calles donde años atrás los veranos eran míos.

No sé muy bien como, ni por qué, acabé parado frente al escaparate de aquella farmacia, examinándolo con cierta curiosidad, hasta que mi mirada se encontró con un expositor de lágrimas envasadas. Fue entonces cuando me pregunté cuanto valdría mi llanto, ese que me ha acompañado tantas noches, y si la tristeza y su calidad irían relacionadas.

Recordé entonces aquel relato sobre un futuro en el que las lágrimas eran la droga que hacía sonreír, pues siempre es agradable sentir que otros están mal, incluso peor que nosotros, pero… eso no explica porque lloro ante los telediarios…

12 comentarios:

Nidesca dijo...

las lágrimas... no tienen precio, sí creo que nos ahorran mucho dinero en el psicoanalista, pues suelen ser curativas.

esa emoción líquida que sale porque sí, porque desea morir un poco afuera, corriendo por nuestro rostro.

quién puede descifrarlas, una lágrima encierra todo un mundo de expresiones y sin embargo les gusta ser silenciosas.

en ellas se van nuestros mayores secretos, los que más duelen.

besitos

Anónimo dijo...

hay ciertas cosas a las que, sencillamente, no se les puede poner un precio

la expresión de tantos estados de ánimo no puede llevar al lado una etiqueta que diga cuánto cuesta

y si algún día ocurre tal cosa, dejaré de llorar


ya tenía ganas de que publicaras :)

un besito

Vgrant dijo...

Recuerdo que Richard Ashcroft cantaba (aún en The Verve):

"Imaginé el futuro y desperté gritando, estaba comprando sentimientos en una máquina"

Esperemos que se equivoque.

Un abrazo.

Paz dijo...

Yo tengo entre los ojos lágrimas de luz extranjera que espero mis amigos sepan apreciar.
En cuanto a las lágrimas viscerales, las de los telediarios, los periódicos, el fuego, la muerte y el odio...esas brotan con más fuerza que el petróleo, pero aún no están tan cotizadas...una lástima....

...gracias por los cálidos abrazos del norte.

இலை Bohemia இலை dijo...

Quizás las lágrimas sean nuestros tesoros más valiosos y aún no nos hemos enterado...

Shh... dijo...

Las lagrimas son desahogo que acarician las mejillas, siempre acaban liberándonos y haciéndonos sentir ligeros.
En el momento en el que llorar se ahce indispensable, tienen un valor incalculable.
Besos.

Nagore dijo...

lo de mal de muchos consuelo de tontos, no suele funcionar casi nunca...

Muchos besos

Elendaewen dijo...

Llorar no arregla nada al fin y al cabo, y tiene doble trabajo, ponerse triste y luego dejar de estarlo.

Un saludo.

Anónimo dijo...

jamás se podría poner un precio a un llanto, pero si alguna vez tus lagrimas valieran algo, seguro que no valdrían tanto como tus sonrisas.
Un texto realmente precioso
Saludos

Bibián dijo...

Las noticias se venden a sí mismas a los adictos del morbo cotidiano. Yo aún no sé que me produce más tristeza: la "realidad" mediática del mundo, con esas pantallas chorreantes de sangre y llanto o el ideal de felicidad y belleza de las modelitos pitillo de farándula. O nosotros mirando... No sé.
Un besito esponjaparalágrimas.

Anónimo dijo...

Lloro...porque nadie se atrevió a levantarme al verme tirada en el suelo.

Un beso.

Ferni V L dijo...

Lás lágrims pueden ser un gran tesoro, ya que se suelen usar pa ra cualquier cosa que no te esperás, ya sea, llorar de tristeza o de emoción

Saludos